Adif sigue avanzando en las obras para la integración ferroviaria en Sant Feliu de Llobregat (Barcelona)

Adif sigue avanzando en las obras de integración del ferrocarril en Sant Feliu de Llobregat (Barcelona).

En una nueva fase de las obras, a partir de hoy, 21 de febrero, se cierra el actual paso inferior de la carretera de Sansón, lo que permitirá llevar a cabo los trabajos preparatorios para la excavación del futuro tramo soterrado en el ámbito del inicio de la actuación (lado Molins de Rei).

Para seguir garantizando la permeabilidad transversal, Adif ha realizado en los últimos meses la ampliación del paso inferior de la calle Comerç, que se pone en servicio hoy. Este paso dispone de dos carriles para vehículos, con una acera a cada lado para los peatones. Además, se ha garantizado la sección para el tráfico de camiones que circulan por el polígono industrial existente.

De acuerdo con el ayuntamiento de Sant Feliu de Llobregat y para compatibilizar la movilidad de los ciudadanos con el desarrollo de las obras, se han diseñado itinerarios alternativos, en los que se ha previsto canalizar el flujo peatonal a través de la pasarela próxima a la calle Picasso y reconducir el tráfico rodado a través de la calle Comerç.

Gran transformación en una ciudad de referencia del área metropolitana de Barcelona

La integración del ferrocarril en el núcleo urbano de Sant Feliu de Llobregat impulsará una de las obras urbanísticas y ferroviarias más relevantes del plan Transformem Rodalies.

Con un presupuesto superior a 120 millones de euros, la operación global de integración -que incluye varias actuaciones complementarias, como la construcción de una nueva estación y diversas instalaciones ferroviarias- permitirá la permeabilidad de la infraestructura ferroviaria de la línea Barcelona-Vilafranca del Penedès-Sant Vicenç de Calders entre los dos sectores de la trama urbana, al eliminar la histórica barrera que representa el actual trazado en superficie.

Asimismo, incrementará las condiciones de seguridad para los vecinos y la explotación ferroviaria, al eliminarse el paso a nivel en una zona con una elevada densidad de tráfico de vehículos y peatones. Además, se crearán nuevos espacios de convivencia y dinamización socioeconómica y se contribuirá a la reducción de la huella de carbono.

Junto a la construcción de una nueva estación soterrada, cuyo edificio de acceso quedará integrado en la nueva urbanización del futuro tramo soterrado, el proyecto promoverá nuevos esquemas de explotación de la red ferroviaria de proximidad en el entorno de Barcelona y su área metropolitana.