Línea Madrid - Galicia
El camino Galicia, cada vez más cerca
El camino Galicia, cada vez más cerca
La línea de alta velocidad Madrid – Galicia, encuadrada en el Corredor Norte/Noroeste, situará a Galicia en el mapa de la alta velocidad española.
Los trazados ferroviarios gallegos siempre han estado condicionados por un accidentado relieve que ha dificultado las comunicaciones ferroviarias con el centro peninsular. De hecho, la primera línea directa entre Madrid y Galicia, por Zamora y Ourense, no se logró hasta 1958.
Dos nuevos momentos históricos se producirán en el ferrocarril gallego. El primero corresponde a finales de 2011, tras la entrada en servicio del tramo entre Ourense, Santiago y A Coruña, que está en obras desde junio de 2005. El segundo tendrá lugar cuando se haga efectiva la conexión con la meseta.
Financiación Europea
“Una manera de hacer Europa”
Situación actual
Situación actual
Ventajas
La nueva relación ferroviaria posibilita una mejora significativa en velocidad, fiabilidad, confort y tiempos de viaje.
La nueva línea Madrid - Galicia se construye en plataforma para vía doble electrificada, con parámetros de alta velocidad, y está diseñada para velocidades máximas de 350 km/h. La llegada de la alta velocidad supone además, para las estaciones de su recorrido, obras de adaptación y modernización de instalaciones, así como una mejora del urbanismo de las ciudades.
Las mejoras de tiempo serán progresivas, hasta alcanzar un tiempo de viaje entre Santiago y Madrid en el entorno de las 3 horas.
Es una clara apuesta por el ferrocarril como medio de transporte que favorece la cohesión social y la dinamización económica.
Descripción del trazado
El acceso a Galicia arranca en la bifurcación de la Línea Madrid-Valladolid en Olmedo y finaliza en Santiago de Compostela, donde enlaza con el Eje Atlántico gallego.
Es un trazado de 434,86 km de longitud donde se implantará señalización ERTMS y ASFA. La línea está diseñada para permitir una velocidad máxima de 350 km/h.
El de mayor longitud tiene 8.574 metros